Masa de pizza con cerveza ¡receta fácil!
Prepara una deliciosa masa de pizza con cerveza en esta receta fácil y sorprendente! La cerveza le da a la masa un sabor único y la hace esponjosa.
Ingredientes esenciales
Estos son los protagonistas que darán vida a tu masa de pizza con cerveza:
- Harina de trigo – La base de nuestra masa, puedes usar la clásica harina de todo uso o, si te sientes aventurero, experimenta con harina integral para un toque rústico.
- Cerveza – El ingrediente estrella que aporta esa esponjosidad y un sabor inconfundible. Personalmente, prefiero una cerveza de tipo lager por su ligereza, pero ¿por qué no probar con una ale oscura para una masa con carácter?
- Aceite de oliva – Un buen chorro no solo enriquece el sabor, sino que también ayuda a que la masa sea manejable. Y si es virgen extra, ¡mejor que mejor!
- Levadura seca – Es el motor de nuestra masa, la que la hace crecer y le da esa textura aireada. Asegúrate de que esté fresca para obtener los mejores resultados.
- Sal – Un pellizco es esencial para realzar todos los sabores. No te pases, pero tampoco te quedes corto.
- Azúcar – Un toque dulce para equilibrar la levadura y darle ese punto perfecto.
Preparación de la masa: ¡manos a la obra!
¡Vamos a por ello! A continuación, te explico cómo hacer la masa de pizza con cerveza paso a paso:
- Mezcla de los ingredientes secos. En un bol grande, combina la harina de trigo (yo uso harina de todo uso, pero si te apetece experimentar, ¡prueba con harina integral!), la levadura seca y la sal.
- Incorporación de la cerveza y mezcla. Ahora viene la parte divertida: añade la cerveza (¡elige tu favorita!) y el aceite de oliva al bol. Mezcla los ingredientes hasta que se integren y forma una bola. Luego, amasa unos 10 minutos hasta que quede suave y elástica.
- Primer levado de la masa. Una vez esté lista, deja que la masa repose en un bol cubierto con un paño húmedo durante aproximadamente 1 hora, o hasta que doble su tamaño. Con esto, la levadura podrá hacer su magia y darle a la mezcla la textura esponjosa que tanto nos gusta.
Si te apetece darle un toque diferente a tu masa, puedes añadir especias como orégano o tomillo. ¡Que tus invitados se queden boquiabiertos con tu creación!
Formado y segundo levado: ¡dale forma a tu creación!
Ya casi lo tienes, solo falta darle forma a tu masa de pizza con cerveza. Pero antes de empezar, quiero compartir contigo un pequeño truco que aprendí hace tiempo. Si dejas reposar la masa un poco más de lo indicado, conseguirás una masa aún más esponjosa y con más sabor. ¡Inténtalo y cuéntame qué tal te fue!
Ahora, sigue estos pasos para formar tu masa y dejarla listo para el horno:
- Bolear la masa y dejarla reposar. Después del primer levado, amasa durante un minuto para desgasificarla. Luego, forma una bola y deja que repose durante 15-20 minutos. Esto permitirá que se relaje y sea más fácil de estirar.
- Estirar la masa y darle forma. Espolvorea un poco en la superficie de trabajo y estira la masa con tus manos o con un rodillo. Si se pega, no dudes en añadir un poco más de harina. Una vez estirada, dale la forma que más te guste: redonda, rectangular, u otra creativa.
- Segundo levado antes de hornear. Coloca la masa en una bandeja para hornear y deja que leve durante 30-60 minutos, o hasta que casi duplique su tamaño. ¡Ya estará lista para hornear y disfrutar de una deliciosa pizza casera!
Recuerda, puedes experimentar con diferentes formas y grosores de la masa para obtener resultados únicos. ¡Anímate a probar y verás cómo tus pizzas caseras serán la envidia de todos!
Receta
Masa de pizza con cerveza
Tiempo de preparación: 2 horas (incluyendo levados)
Una masa de pizza esponjosa y llena de sabor, gracias a la cerveza como ingrediente estrella.
Ingredientes
- 500 g de harina de trigo
- 330 ml de cerveza (lager o tu favorita)
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 1 sobre de levadura seca de panadería (5,5 g)
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharadita de azúcar
Instrucciones paso a paso
- En un bol grande, mezcla la harina, la sal, el azúcar y la levadura seca.
- Agrega cerveza y aceite de oliva, y amasa durante 10 minutos hasta obtener una textura suave y elástica.
- Forma una bola con ella, cúbrela con un paño húmedo y déjala levar en un lugar cálido durante 1 hora y media, o hasta que doble su tamaño.
- Una vez que haya levado, divídela en dos porciones iguales y bolea cada una.
- Estira cada bola sobre una superficie enharinada, dándole forma redonda u ovalada, según tu preferencia.
- Coloca las bases de pizza sobre una bandeja forrada con papel de hornear y deja que reposen durante 30 minutos más, para un segundo levado.
- Precalienta el horno a 225°C y hornea las pizzas durante 10-15 minutos, o hasta que esté dorada y crujiente.
Notas:
- Puedes agregar especias a la masa, como orégano o ajo en polvo, para darle un toque extra de sabor.
- No olvides dejar que descanse después de estirar, para que se asiente y sea más fácil de manipular.
- Si no vas a usar toda la porción de una vez, puedes congelarla y utilizarla en otra ocasión.